Siempre se mezclan las cosas cuando tengo a mano algún suspiro: estado civil/afectivo; situación laboral; fase filosófica en la historia de las búsquedas personales…de algo; aspectos familiares cotidianos, eventualidades fisiológicas hormonales, virósicas o bacterianas, situación político – económica actual y algún que otro evento de trascendencia internacional como el aumento del cambio con el dólar. Otra que el vuelo de la mariposa, que se hizo tan famoso. Como dije alguna vez, esto no parece una mariposa sino un jumbo con acoplado.
Estoy intentando pensar la complejidad, que aparentemente se hace necesaria su consideración sólo cuando la cosa está que arde. Acaso alguien se pregunta por qué variadas y complejas circunstancias (ojo que no digo causas lineales) las cosas marchan tan bellamente a veces, en algunos ámbitos. Debería existir la disciplina que investigue las características del “Bello Sistema”; por saludable, por “bueno” bajo algún aspecto moral, por eficaz bajo algún objetivo no reprochable.
Claro que sí existen aquellas investigaciones de bellos sistemas naturales como el vuelo del ave y el sistema inmunológico del ser humano. Pero ¿y los bellos sistemas sociales no existen? ¿y los ecológicos, en los cuales el ser humano cumpla un rol tan importante como los demás?
¡Ay, la belleza de la lucha social! ¿Por qué no se pueden poner en la misma oración las palabras “huelga” y “belleza”? ¿Acaso la expresión de deseo, esperanza, solidaridad, y respeto por uno mismo sólo es aceptable en el ámbito de lo privado?
Bello artículo 14 bis de la Constitución Nacional.
miércoles, marzo 18
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